Thursday, December 28, 2006

en México hasta el café pica...

Calor. Enrojecimiento. Comezón. Hinchazón. Dolor intenso. Pequeñas cantidades pequeñas de sangre o secreciones. Tos. Cosquilleo en la garganta. Opresión en la garganta o pecho. Hasta ahí, aunque podía ser también Problemas para respirar o silbancias, sudoración, ansiedad, náusea o vómito, mareo, desvanecimiento y hasta la muerte. En ningún lugar lo mencionan, pero también se te puede dormir la lengua, paralizar los músculos faciales e incluso el rostro puede tomar la forma de una calabaza... sin el romanticismo de I love you pumpkin'... y si, se parece tanto al desamor con el que te extraño...

Si hay algo que no soporto es la ingratitud. Ella se acercó describiendo círculos a mi alrededor. El doctor carmona y yo celebrábamos el final de su trabajo en campo. Discreta pero sin perder su objetivo, vibró a mi lado y sin hablar me pidió café. De olla. Yo tomaba una Montejo para acompañar el pulque de carmona, de manera que asentí sin problemas. Por un momento me olvidé de ella. Al voltear la mirada, había desaparecido. Me llevé la taza de barro a la boca y bebí del elíxir negro. Una textura extraña me sorprendió en los labios. Asientos de café, me dije procurando ignorar cierto canto subconsciente que insistía en señalar el diminuto cuerpo de un artrópodo. Algo de asco. Demasiado tarde me di cuenta que era ella, cuando en un desesperado intento por defender su individualidad, negándose a volverse tan sólo una parte de mí, perforó mi paladar como sólo ellas saben e inyectó la ponzoña que tan bien las define. Bellas y mortales. Como es bien sabido, en su pequeño intento por destruírme perdió consciencia del peligro y dejó sus vísceras en mi boca. En un arco reflejo la expulsé de mi boca y de mi vida tan fuertemente como pude, y ella se arrastró sobre el concreto teotihuacano apenas unos dos centímetros antes de morir eviscerada, cubierta de babas y cuasiahogada en café...

...la cabrona Apis melifera... si ale, como me acordé de ti...

...el amable carmona retiró su aguijón sobre la carretera no sin la sorpresa de los transéuntes en dirección opuesta que veían en el acto no la noble ayuda a un dolido y necesitado sino algo mas relacionado con el fornicio pederastra... retiró el triángulo quitinoso no sin asco, y encías y lengua dolieron y se hincharon hasta dificultar mi habla... eso... al fin una criatura de dios logró hacer que me callara...

en fin, hable con jimena y me reí tanto que ahora no se me quita el dolor ni con tres cafiaspirinas... quiero dormir...

y francamente lo que mas me duele (después del ego, que evitó que publicara una foto con mi cara de calabaza)... ¡¡¡es la sopa mixteca que no me pude terminar!!!!

Friday, December 22, 2006

readin' checkpoint

como siempre, me gana elñ nervio y no me espero hasta navidad... hipócrita de fin de año cual soy, le robo otra idea al Terrible Master of Introspection... libros escritos con letras y leídos este año. Nunca son suficientes y muchas veces parecen esnobeo pero en fin:

La condition humaine, André Malraux
Death of a Salesman, Arthur Miller
The aspen Papers, Henry James
The Turn of the Screw, Henry James
Animal Farm, George Orwell
Asfixia, Chuck Palahniuk
El amor es un perro infernal, Charles Bukowski
The Flash of Lightning Behind the Mountain, Charles Bukowski
Por favor, rebobinar, Alberto Fuguet
Rough for radio I y II, Samuel Beckett
Language and Mind, Noam Chomsky (aunque para ser francos no entendí prácticamente nada)
Post-Scarcity Anarchism, Murray Bookchin (en progreso, cuesta digerirlo)
La Oveja Negra y demás Fábulas, Augusto Monterroso
Voyeurs, Andrés Jorge
Marcovaldo, Italo Calvino
Plays from Wolly Mammoth, varios autores... recomiendo The Art Room de Aronson.

Releídos fuera de tiempo:
El topo, Alejandro Jodorowski
La Peste, Albert Camus
Fuegos, Marguerite Yourcenar
Naked Lunch, William Burroughs
L'anarchia, Errico Malatesta (en una edición fabulosa que me prestaron en infoshop)
Cuentos Completos, Vladimir Nabokov (bueno, solo algunos)

madres. ahora así listados me doy cuenta de algo atroz: ni un mexicano. a lo mas un guatemalteco. y un chileno. mucho gringo porque fue intencional, a donde fueres...
también pretendía ufanarme de entrarle a dos nuevos idiomas, pero la neta leí una traducción pésima (de esas que dicen "mamaíta" y "colgábanle los cojones") de choke... y el poemario de bukowski tampoco da para mucho...

...para completar el hipócrita comentario (iknowiknow... oh! you're sooo catholic! but I'm not!!!!): dos propósitos al respecto para el año: leer más y leer mejor. en el último, léase: leer más mexicas y menos traducciones

se aceptan comentarios... de todos modos nadie lee los comentarios...

Wednesday, December 20, 2006

calamidades decembrinas

al rizo frontal que cayó sin gracia aquel 19 de diciembre sobre tu cordura,
a la asfixia de Chuck Palahniuk

para escucharse con aphex twin… o belle&sebastian a falta de…

Tengo malas noticias para todas aquellas mujeres que siguen creyendo que el amor es más importante que la estabilidad:
de acuerdo con el mundo, se equivocan.
Por favor,
llámenme.
Las demás pueden ir de compras a disfrutar de los ofertones en el Palacio.


Odio diciembre.

Mucho.

Mes de un aguinaldo bulímico que de manera presta y rauda devolveremos antes de que termine la primera quincena. El sistema debe continuar.

Mes de camaradería tan profunda como mi cenicero de Miró. De fraternidad para con tus hermanos de credo y por lo tanto de implícita alienación de todo aquel hereje que pertenezca a otro credo. O peor aún, que carezca de tal. “Hipocresía católica” no es la frase más atinada, pero es la primera que me viene a la mente.

Horadado con dos asquerosas festividades religiosas, la una le lleva mariachis a un lienzo en homenaje al triunfo de la fe católica sobre la indiada, la otra celebra el milenario cumpleaños de un dios que ya sabían venía a morir por ellos. Que les pide que se dejen joder a gusto, poniendo la otra nalga. Apenas en tres meses, celebrarán su muerte de nuevo. Y en el inter, se comen su cuerpo. “Perverso” puede no ser la palabra más atinada, pero es la primera que se me ocurre.

Mes en que el pueblo teófago por excelencia se da la mano y apoya al prójimo donando al teletón y enviando postalitas navideñas (tradición imperial bretona) dibujadas por pintores sin manos. Léase también: con las patas.


Las primeras dos semanas son sin falta un período de sobremarcha de motores al punto del desviele para terminar todo aquello que no se hizo en seis meses. En las dos segundas sucede algo curioso: el motor híbrido del mexica se modifica de manera que sobreviva hasta el seis de enero a base de puro alcohol. Léase también: fermentación alcohólica aeróbica facultativa.

Durante la segunda semana, ocurren todos los convivios navideños laborales y de oficina. El pretexto perfecto para que el jefe tenga oportunidad de embriagar a la joven secretaria que a su vez busca un aumento desde septiembre. El macho de la especie Mexica officinalis del Valle de México denota su jerarquía con humillaciones socialmente aceptadas para sus coespecíficos. Léase también: complejo de inferioridad de toda una clase social.

Diciembre. Mes de invierno en que se supone que cada vez que uno de tus colegas de trabajo tosa en tu cara mientras te da “tu abrazo” tu sonrías de regreso y le apretujes cual si en realidad te doliera dejar de verlo un par de semanas.

Mes de cambio de presidente. Mes panista en toda su extensión: religioso y mercantil. Mes en que la nueva cámara demostrará su inutilidad determinando su propio sueldo antes de irse de vacaciones. Mes en que, como dijo pi, el último día de vacaciones debes correr a la facultad a conseguir lo que quede de pareja para sobrevivir tres semanas de frío y soledad. Léase también: lo que sea. Léase también: un biocobertor a tiempo evita un mal arrepentimiento.


Patético diciembre que celebra, ante todo, el triunfo del sistema neoliberal a través de la corrupción del hombre mediante la exacerbación del consumismo y la imposición de necesidades artificiales. Mes de malls abarrotados de vacuas cuarentonas pudientes que intentan llenar su vacío matrimonial y su falta de autorrealización con el clásico par de botas, al tiempo que corrompen a sus propios vástagos quinceañeros imberbes inculcando la cultura de apariencias y posesiones materiales. O que, ¿no resulta curioso que este mes de valores humanos y familiares sea también el de mayor consumismo?

Diciembre. Para mí, siempre ha sido el mes en que menos me siento parte del mundo real. Es decir… ¿porqué están todos tan contentos si al hacer una revisión del año siempre se está invariablemente m
ás jodido que antes? El veinticinco de diciembre como ejemplo culminante: en nochebuena todos se encuentran tan emocionados por desilusionarse en la mañana de navidad. Opio masivo. Léase también: religión. “Autocomplacencia” no es la palabra correcta, pero es la que me viene a la mente.

Al menos yo no puedo dejar de preguntarme… ¿cómo es que después de noviembre, mes de muertos mesoamericanos, le sigue una festividad extranjera corrompiente y carente de fondo? El 30 de noviembre mi pensamiento es siempre el mismo: soy un oso. Un grizzly o algo así. Sé que viene el inverno. Y diciembre. Es hora de hibernar. Tragar más allá del hastío durante noviembre y dormir acobijado en mi propia grasa en el subsuelo mientras arriba el lavado de cerebro se denota efectivo y se abrazan y bailan y cantan y hacen como si sus vidas no fueran una mierda. Despertadme ya que llegue su cruda, cuando recojan los tepalcates de su patio trasero, cuando en el silencio solitario de la casa del día siguiente solo suene el frío choque de botellas de cerveza vacías, cuando el aire enrarecido de cigarro sea forzado a través de ventanas demasiado pequeñas, cuando el crédito se haya terminado y echen mano de sueldos aún sin cobrar, cuando la persona en la cama a su lado y carente de ropa interior perspire alcohol y resulte ser su tío, cuando se den cuenta que los propósitos sin cumplir son los mismos desde hace seis años.

Diciembre. El mes más feliz del año. Mes en que uno coge sólo para quitarse el frío. Mes en que uno sonríe muy a su pesar y abraza a aquella tipa que no le acaba de convencer, pero cuya presencia disminuye la obscura soledad que uno mismo irradia. Mes en que uno se descubre sin amigos ni familia. O peor aun, con ESOS amigos y ESA familia. Léase también: Diciembre, ese mes en que no se aplica eso de más vale solo…

Diciembre, ¡el mes que registra más suicidios en-el-mun-do! “
Irónico” no es la palabra correcta, pero es la primera que me viene a la mente. Léase también: diciembre, mes de amarrarse una piola al cuello. Léase también: mes de sentir que las ventanas son suficientemente grandes para atravesarlas. Léase también: mes de practicar fellatio al cañón de una escopeta. Léase también: mes favorito para preparar cocktails de calmantes. Léase también: mes en que el incremento de venta de navajas de afeitar se encuentra correlacionado con el incremento en renta de bañeras. Léase también: mes en que los dedos húmedos del hombre buscan con más frecuencia el agujero del socket de un foco.

Lo que, a la española, me caga los huevos de este mes, es que a uno no se le permite llorar. Está como que “
out”. Se supone que es un mes de felicidad y calor fraternal, y por lo tanto a nadie se le permite estar solo. O al menos expresar soledad o melancolía. “Represión” no es la palabra más precisa, pero es la primera que me llegó a la mente.

Yo siempre me enfermo y luego me deprimo. O viceversa. Depende que tenga más: frío o soledad. Ahora estoy enfermo.

Diciembre, ese mes en que por primera ves traté de refugiarme en tus ojos y sólo encontré el reflejo de las marquesinas y anuncios luminosos de aquella plaza. Diciembre, ese mes en que te guardas el rompimiento hasta que salga el sol de nuevo. Diciembre, ese mes en que no puedes decir “
ya no te quiero” aunque ya no te quiero. Diciembre, ese mes en que la masturbación se vuelve una actividad de intercambio de regalos y pierde su chiste en el baño. Diciembre, ese mes en que no se si me duele extrañarte o no extrañarte.

Diciembre, igualito que como aquella pared cálida que nos gritaba desde Washington She needs you more than she loves you. Diciembre pues, ese mes en donde repulsivamente las necesito más de lo que las amo. Y a mi también… “
Patético” no es la palabra más adecuada, pero sí la que mejor se aplica.


angie, i kind´o miss you these days…

Saturday, December 09, 2006

Guerra vs la UNAM

Uno no hace esto de reeditar entradas, pero estaba harto grande y solo hay que poner un link con la palabra "mentiroso" a la dirección http://sitl.diputados.gob.mx/album_comisionesLX/curricula.asp?301 así: mentiroso,

si quieren saber mas, entren al blog de edgardo, con logros y demases:
http://lab-journal.blogspot.com/
ahi también está el texto original que estaba acà...

Saturday, December 02, 2006

Membrillo en Valladolid

The 1st meeting of the SCME (an honorable abbreviation for the "scientific" mexican ecological society).... nice enough! There was a bit of everything. Many more pictures in my picasaweb albums!:




Ale H. sold some books...


...The Cyanoteam captured Matías...


...Libertad was eager to explain her poster and after that we danced Simón...


...Matías was rescued by a handsome heroe...






...Bald Eagle enjoyed Monkey Sperm...

...we all went into a jacuzzi tub together...
...I went totally blank during my presentation...



... flirted with Jules in the balcony...



...and with Esmeralda...




...and ended up all alone...





...Jules and Nuri walked towards abduction...


...and Jules smiled once...









...I got elegantly drunk with nuri...


...but we never lost style...





...by the end I bought some paste ice cream..






...and enjoyed it this much!!!